LA
PIRAMIDE DE KEFRÉN
Planta
y alzado de la pirámide. El Norte se encuentra a la derecha del plano.
Desde
la distancia, la pirámide de Kefrén (Khafre o Jafra) parece la más
alta, aunque originariamente era 3 metros más
baja que la de Keops (143 metros frente a los 146 de la pirámide de
Keops, y 15 metros menos de lado- 215 m. Frente a los 230 de la
de Keops), al estar hábilmente situada
en un saliente de la meseta de Giza (Guiza), le confiere mayor altura.
Sumado esto a que conserva el revestimiento de su cúspide (la de Keops
no sólo lo ha perdido, sino que ha perdido también sus últimos
10 metros) y que la pendiente de sus lados es
mayor (53º10’ frente a los 51º 50’40’’ de la de Keops); todo
ello le hace parecer más
grande que la de su padre, y es apropiadamente llamada en egipcio
antiguo “Khafre
es grande” o “la Gran Pirámide de Khafre”.
Según
Stadelmann, quizá originariamente Kefrén se llamaba Khafkhufu
(Jufujaef) y era el
propietario de una gran doble mastaba (G 7130-40), situada en el
Cementerio Este de Giza. La temprana muerte de sus medio hermanos Kauab
y Djedfre (Dyedefra) habría encumbrado al poder a
Khafkhufu que habría cambiado su nombre por el de Khafra.
No
se sabe con exactitud cuando empezó la desmantelación del
revestimiento en piedra caliza de Tura pulida de la pirámide. Puede que
las caras oeste y norte empezaran a desmantelarse en le XIX dinastía,
pero también hay quien sugiere que para concluir un templo en Heliópolis,
Ramsés II ordenó utilizar el revestimiento de la pirámide de Khafre.
Otros sugieren, que una gran parte del revestimiento fue removido entre
1356 y 1362 para ser
utilizado en la construcción de la “mezquita de Hassan”,
dejando así al descubierto la entrada superior de la pirámide,
facilitando la localización a los ladrones que poco después pudieron
entrar en la pirámide. Concretamente, el historiador árabe Ibn Abd
as-Salaam establece el año 1372 como el año en el que se llevó a cabo
la apertura de la pirámide, durante el reinado del Gran Emir Jalburgh
el-Khassaki. Los túneles que rodean el taponamiento del pasaje de
entrada podrían haberse excavado en éste tiempo. Con posterioridad, ésta
entrada fue de nuevo ocultada, tanto es así, que en 1817
Giovanni Caviglia intentó en vano encontrarla, lo que consiguió el 2
de marzo de 1818 Giovanni Batista Belzoni.
En
1837 fue Perring el que realizó una exploración más completa de la
pirámide. Trazando un plano bastante exacto de la misma.
En
1853 Mariette excavó el templo del valle de Khafra y fue el descubridor
de la famosa estatua en diorita de dicho faraón, que actualmente está
expuesta en el museo del Cairo (JE 10062), en la que se representa al
rey sentado en su trono, y justo detrás de su cabeza le confiere
protección con sus alas el dios halcón Horus.
EL
EXTERIOR
A
diferencia de la pirámide de Keops, la de Kefrén, presenta un aspecto
menos trabajado, de menor calidad. Para ello sólo hay que fijarse en
las esquinas, donde podemos observar que el material es muy irregular.
En el centro de la pirámide, su núcleo, presenta una construcción
también poco cuidadosa: los bloques no siempre van dispuestos en
perfecta horizontalidad, las uniones entre ellos a menudo son demasiado
anchas, y el mortero es, con demasiada frecuencia, usado para la unión
de los bloques.
Cúspide de la pirámide. La fotografía inferior muestra las
imperfecciones del recubrimiento (fotografía del autor)
Si
nos fijamos en su cúspide veremos que presenta una pequeña desviación
fruto de un error de cálculo a la hora de trazar los ángulos de la
base y la pendiente, que obligaron a unirse las cuatro caras de forma
poco ortodoxa, originando ésta desviación.
La
hilada inferior del revestimiento es en granito, el resto
originariamente estuvo forrado de piedra caliza de Tura. De todo éste
revestimiento, aún permanece la cúspide. Éstas piedras de
revestimiento de la cúspide presentan un grosor pequeño (unos 50 cm.)
en comparación con las piedras de revestimiento que podemos observar en
la pirámide de Keops. Llama la atención las irregularidades que
presenta éste revestimiento, consecuencia quizá de haber cortado y
alisado los bloques antes de colocarlos, debido al poco espacio que
existe para trabajar en la cúspide de la pirámide. También es posible
que, debido a la ausencia de bloques de revestimiento inferiores que den
soporte a la cúspide, pequeños temblores de tierra podían haber
desplazado las losas y originar esos pequeños escalones entre ellas.
EL
INTERIOR
La
pirámide de Khafre originalmente era de mayores dimensiones hacia su
cara norte, pero éste plan fue modificado (no hay una explicación
determinante al respecto) y puesto que una de las primeras estructuras
internas que se construyó
(después de nivelar el terreno) era la cámara subterránea, con su
pasaje de acceso y entrada, al modificarse la posición final de la pirámide,
desplazándola hacia el sur, la entrada original se quedó fuera de la
misma, a unos 30 metros de la cara norte, en el suelo. Según Lehner,
quizá esta presencia de dos entradas se deba a una vacilación durante
la construcción entre dos sistemas de pasajes. Recordemos que en la pirámide
encorvada de Seneferu, también presenta dos entradas (aunque no en la
misma cara: una en su cara norte y otra en su cara este). También puede
recordar a la pirámide de Micerinos, que aunque sólo presenta una
entrada, existe un corredor que parte de la antecámara hacia el corazón
de la pirámide, buscando el exterior, que de haberlo encontrado, sería
muy similar a lo que se presenta en la pirámide de Kefrén.
Éste
sistema de pasajes no está centrado respecto al eje vertical de la pirámide,
sino que se encuentra desviado al éste, unos
12 metros. La entrada situada en el suelo es la llamada “la
primera” o “la más baja” que da acceso a un pasaje descendente
(al final del cual todavía se conserva, apoyada en la cara oeste, el
bloque que sellaba dicho pasaje) al que le sigue un corredor horizontal
de 1,7 metros de alto, para de nuevo ascender y enlazar con otro
corredor horizontal que nos lleva finalmente a la cámara funeraria.
Aproximadamente a la mitad del primer corredor horizontal, un corto
pasaje se abre en la pared oeste que desemboca en una pequeña cámara,
donde parte del ajuar funerario pudo estar allí ubicado. Hay también
quien le atribuye una función de Cámara Serdab. Según algunos autores
la mal llamada “cámara de la reina” en la pirámide de Keops,
era en realidad una cámara que contendría una estatua Ka –el
doble espiritual del faraón-, como la estatua de Djoser (Dyeser)
sellada en una pequeña cámara exterior situada en la cara norte de su
Pirámide Escalonada.
Losa
de granito que bloqueaba la parte inferior del pasaje descendente de
entrada (fotografía del autor)
La
segunda entrada, ya en la propia pirámide, llamada “la segunda” o
“la más alta”, está situada aproximadamente a 12 metros del nivel
del suelo, dando acceso a un pasaje construido con bloques de granito
rosa que primero desciende
y después corre horizontalmente. En el punto donde empieza a ser
horizontal, hay una barrera, también de granito rosa (que los ladrones
ya en la antigüedad, soslayaron cavando un túnel que rodeaba éste
bloqueo). Este corredor horizontal camina hacia el sur, desembocando en
la cámara funeraria, que se haya totalmente excavada en la roca madre,
siendo solamente el techo (consistente en dos enormes losas
de caliza colocadas a dos aguas) el que se encuentra dentro de la
estructura de la pirámide (ver plano). Éste techo se halla justo en el
eje vertical de la pirámide. La cámara funeraria, de gran tamaño y
altura, es rectangular y se encuentra orientada de este a oeste. Se
especula con que sus paredes iban a estar recubiertas de granito rosa,
como en la cámara funeraria de la pirámide de
Khufu, pues el aspecto que presentan es muy rudimentario y poco
acabado. Tanto en su pared norte como sur, se aprecian dos oquedades al
estilo de los “conductos de ventilación” de la cámara funeraria de
Khufu, pero es sólo en apariencia, pues son sólo dos tramos
horizontales muy cortos, que pudieran haberse utilizado para situar el
anclaje de alguna estructura de madera necesaria para la construcción
de dicha cámara, o bien para situar el sarcófago. Sarcófago que se
encuentra situado junto a la pared éste, es de
granito negro y se halla medio incrustado en el suelo. Cerca del
mismo encontramos otra oquedad en el suelo que originalmente contenían
los vasos canopos, cuya tapa sería una losa del revestimiento del
suelo. De la momia del faraón nada se sabe, pues cuando Belzoni entró
en ésta pirámide se las prometía muy felices, pero lo único que
encontró en el sarcófago fueron unos huesos de vaca, restos del banquete de los ladrones que saquearon la pirámide,
así como una inscripción en árabe en la pared éste que decía así: “El
maestro Mohammed Ahmed, lapicida, los abrió; y el maestro Othman estuvo
presente en la apertura y el rey Alij Mohammed estuvo presente desde el
principio cuando se volvió a cerrar”.
Stadelmann sin embargo dice
que quizá esos huesos fueron introducidos en el sarcófago por unos
intrusos a modo de ofrenda en un periodo muy posterior al enterramiento
del faraón, y lógicamente cuando la momia ya había desaparecido.
Belzoni, sí dejó constancia de su hazaña, realizando un
lamentable y enorme graffiti en la pared norte que dice así: “Scoperta da G. Belzoni 2 mar. 1818”.
Cámara
funeraria (fotografía del autor)
La
localización y la relativamente simple construcción de las estructuras
internas (cámara funeraria, corredores, etc.) hace suponer que los
constructores aprendieron la lección de las complicaciones surgidas en
la construcción de las estructuras internas de la pirámide de Keops, y
prefirieron una estructura relativamente sencilla.
LA
PIRAMIDE SATÉLITE
En
el exterior se conservan unos muros circundando a la pirámide por su
cara norte, oeste y sur, restos de lo que debió ser el cercamiento del
recinto piramidal.
En
el lado sur de la pirámide, encontramos la casi completamente destruida
pirámide satélite (G2a), de la que únicamente queda los
perfiles de los cimientos y algunos bloques de su núcleo. ¿Cuál era
la función de éstas pirámides satélites?. Hay varias teorías:
-
Según algunos autores las pirámides satélites serían el lugar
de enterramiento de la estatua
Ka del faraón. Esta teoría se ve apoyada por los vestigios
encontrados en ésta pirámide satélite: se encontraron unos trozos de
madera de cedro (además de fragmento de huesos de animales) que fueron
rearmados y resultó ser un marco de madera en forma de un Sah Netjer
(Neter), o cabina o caja divina, que servía para sostener la estatua
ka, como podemos observar en las escenas representadas en algunas
mastabas, como la de Merensakh (Meresanj), nieta de Keops, en la que el
Sah Netjer sostenía la estatua Ka de la difunta camino de la tumba.
-
Aunque no se
encontraron signos de enterramiento, según Maragioglio y Rinaldi
concluyeron que una de las consortes de Khafre fue enterrada en dicha
pirámide.
-
Existe otra versión, la dada por Stadelmann, que establece un
paralelismo con la pirámide encorvada de Seneferu en Dashur, que también
presenta una pirámide satélite en su cara sur, que según su teoría
era sólo una “pirámide de culto”. Esta opinión se vio reforzada
con el descubrimiento de una pirámide de culto, con planta en “T”
muy similar a la pirámide satélite de Kefrén,
en la esquina sudeste de la pirámide de Khufu.
-
Finalmente hay otra opinión
al respecto, la emitida por el Dr. Zahi Hawass, que le atribuye
protagonismo en la fiesta Sed, como lugar donde el faraón se cambiaría
de vestimenta. El Dr. Hawass parte de la premisa de que la pirámide satélite
es el equivalente a la tumba sur del complejo de Djoser. Puesto que en
dicha tumba sur existen representaciones del rey con la corona blanca en
la cabeza, en el acto de correr, empuñando el flagelo en la fiesta sed,
es factible pensar que exista un nexo de unión entre dicha fiesta y la
tumba sur, o en su defecto, la pirámide satélite. Así, la cámara de
dicha pirámide sería usada por el faraón para quitarse el manto y la
corona, y colocarse la túnica y empuñar el flagelo, tras lo cuál
saldría al patio exterior a celebrar la fiesta Sed.
LAS
GALERÍAS DE KEFRÉN
Al
oeste de la pirámide de Kefrén, Petrie descubrió las ruinas de un
gran número de habitaciones orientadas de este a oeste. Él asumió que
eran alojamientos para los trabajadores que construyeron la pirámide.
Hölscher agregó que en su opinión, 4 ó 5 mil personas fueron
alojados en 111 grandes habitaciones. Sin embargo, Lehner y Hawass en
recientes investigaciones sugieren otra explicación: esta estructura no
era un asentamiento para alojar trabajadores, más bien se puede
considerar un almacén o una fábrica (talleres) que suministraba
material a los trabajadores de la pirámide. Se basan en que si hubiera
sido un asentamiento para los trabajadores, se encontrarían restos de
la basura que genera un asentamiento humano durante un largo periodo de
tiempo, como ceniza, fragmentos de loza, etc., Y de esto no hay nada.
Sin embargo sí se han encontrado pruebas que nos llevan a pensar que se
trata de un taller artesano, como por ejemplo, un fragmento de
estatuilla del rey con la
corona del sur, pintado en punteado rojo y negro, para imitar el
granito. La pieza representa una estatua en un patio del templo con el
techo proyectado como una columnata, como las que se encontraban el
templo alto o funerario de Kefrén (como si la estatuilla formase parte
de una especie de maqueta del mismo). Además, esas galerías fueron
vaciadas meticulosamente, lo que indicaría que el contenido de las
mismas era muy valioso. Sin embargo, si hubiera sido un asentamiento, ¿por
qué vaciarlos tan cuidadosamente si iban a ser rellenados con arena?.
Además se encuentran muy alejadas del principal asentamiento de los
trabajadores de la pirámide en Giza, encontrado por Lehner al sur del
templo de del valle de Micerinos.
En
cualquier caso, también es cierto que se han encontrado restos de
plantas, de huesos, etc., por lo que quizá estas galerías tuvieron
varias funciones.
Autor
del artículo: José Manuel Torres.
Bibliografía |