Imperio Nuevo
(1550 - 1069)
Dinastía XVIII
Por muchas razones a esta dinastía se la considera la más importante de toda la historia de Egipto.
Cuando subió al trono Iahmes I (Amosis) contaba con la edad de 10 años, como era menor de edad, la regencia de Egipto recayó en su madre Ahhetep. Como ya dije, luchó contra los Hicsos y los expulsó definitivamente del país llegando en su persecución hasta Palestina. Los Hicsos fuero vencidos con las mismas armas que ellos habían introducido. Al termino de su campaña militar contra los Hicsos arremetió contra el reino de Cush, situado al sur de Egipto y que fuera aliado de estos. Después de tres campañas militares Iahmes I se adueñó de su territorio hasta la segunda catarata. Esta zona tenía mucho interés para Egipto por sus enormes reservas de oro.
A partir de su reinado empezó a florecer el comercio exterior sobre todo con Fenicia y Creta. También comenzó a aumentar la actividad constructiva de monumentos y templos.
En lo que concierne a la religión el dios principal tebano era Amón, aunque Iahmes I empezó a potenciar también el culto por Osiris, el dios de la vegetación y sobre todo el dios del Mundo Inferior o funerario.
Iahmes I fue enterrado en la necrópolis tebana de DraAbul-Naga.
Le sucedió en el trono su hijo Imenhetep I (Amenofis). Este faraón es mayormente conocido por haber cambiado radicalmente las costumbres funerarias. Pasó de la unión física de templo funerario y sepultura real a construirlos por separado. Se cree que fue el fundador de la necrópolis del Valle de los Reyes, aunque su tumba no se a encontrado allí todavía.
Imenhetep I no dejó herederos así que su hermana, la princesa Amosis transmitió los derechos a su esposo. Como el derecho al trono había sido por ley y no por nacimiento (en este caso el derecho a reinar lo daba Amón) el nombre que adoptó fue Dyehutimes I (Tutmosis), ya que Toth es entre otras cosas era el dios de la ley.
Tampoco Dyehutimes I dejo herederos varones. Su hija legítima Hatshepsut se casó con su hermanastro Dyehutimes II (el padre era Dyehutimes I y la madre la pricesa real Mutnefert) quien gobernó a Egipto durante cuatro años escasos.
Le sucedió su hijo Dyehutimes III que era un niño de corta edad. Debido a ello, la reina viuda Hatshepsut, se hizo cargo de la regencia. Durante los primeros años indistintamente según las necesidades hacía las funciones de rey o de reina, esta atípica corregencia duró poco ya que en el año 7 de Dyehutimes III, Hatshepsut se tituló definitivamente rey gracias al apoyo del clero que ideó un sistema para hacer legitimo su nombramiento como faraón. La llamada Teogamia: El dios (en este caso Amón) se encarna en el faraón para engendrar al heredero, que recibe así, el derecho a reinar.
Aún siendo mujer se hizo representar en los monumentos con rasgos masculinos, incluso con la famosa barba ritual.
Durante su reinado se rodeó de personas influyentes y con cargos religiosos como, Hapuseneb, visir y Sumo Sacerdote de Amón y en particular de Senmut, Segundo Sacerdote de Amón y su arquitecto real.
Una de las expediciones más documentadas de su reinado fue la que hizo al país de Opone (Punt) en busca de productos exóticos como maderas preciosas, resinas aromáticas, arboles del incienso, maderas perfumadas de tres clases (toshep, jasuy, imet), ébano, marfil, oro. En el templo mortuorio de Deir el-Bahari construido por Senmut en una de sus terrazas se encuentra representado este viaje. Se cree que Punt se encontraba en la costa del Mar Rojo, en la desembocadura del río Elefante muy cerca del Cabo Guardafui.
En el año 22 de reinado muere Hatshepsut reinando ahora en solitario el ignorado rey Dyehutimes III. Lo primero que hizo después de su muerte fue intentar recuperar los territorios perdidos en Asiria conquistados anteriormente por Usertsen III (Sesostris). A lo largo de casi 20 campañas militares, Dyehutimes III luchó primero contra el rey de Qadesh y luego en posteriores campañas contra los reyes de Mitani, situados en la zona del río Eufrates.
La misma política exterior fue continuada por Imenhetep II y Dyehutimes IV. Siguieron las luchas contra los pueblos Mitani en el Eufrates. Viendo Dyehutimes IV que las fuerzas estaban niveladas, se casó con una hija del rey de Mitani para sellar la paz entre los dos pueblos. Restablecida la paz se dedicó a la conservación y restauración de monumentos y templos. Uno de los que rescató de las arenas del desierto fue la gran Esfinge de Giza. Según cuenta la leyenda, Dyehutimes, antes de ser nombrado faraón se quedó dormido bajo la gran Esfinge. Entonces en un sueño el dios Ra le comunicó que si despejaba de arena la esfinge sería en un futuro proclamado rey, y como fue así mandó colocar un estela entre sus patas para recordar que debía el trono, no a Amón, si no al dios-sol Ra simbolizado por dicha esfinge.
A su muerte le sucedió su hijo Imenhetep III, más conocido como el Magnífico. Era hijo de DyehutimesIV y de Matenuya. Durante su reinado de casi cuarenta años la civilización egipcia alcanzó la cima. Fue más bien un monarca pacifista, lo demuestra el hecho de que continuó la practica matrimonial inaugurada por Dyehutimes IV casándose con una hija del rey de Mitani llamada Shuttarna II, además se casó con una hija del rey de Babilonia y con otra del rey de Arzawa. También estuvo casado con la que sería la reina principal Tiy.
Aunque la capital seguía siendo Tebas, Imenhetep III pasaba gran parte del tiempo en Menfis. Esto hizo que los leves intentos de su antecesor por acercarse más al clero de Heliopolis y por consiguiente al culto solar fuese continuado y con más fuerza por Imenhetep III. Empezó a dar cargos de importancia al clero de Heliopolis, mientras que por otro lado, se los quitaba al Tebano.
Imenhetep III sembró el país de templos y monumentos siendo el responsable máximo de ello el visir y arquitecto Amenhetep, hijo de Hapu; fue tal su fama que en tiempos de la Baja Época fue divinizado.
Durante todo su reinado no salió de Egipto; nunca viajó a sus posesiones asiáticas. Devido a ello poco a poco las relaciones entre Egipto y Mitani se fueron enfriando. Comenzaron las intrigas palaciegas. Imenhetep III sintió la necesidad de refugiarse en sus orígenes religiosos aproximándose ahora un poco más al clero de Amón.
Ya anciano, el faraón para reforzar los lazos con el pueblo Mitani, pidió casarse con una hija de su rey. La princesa Tadu-Jeba fue enviada por su padre Tushratta para desposarle. Pero su llegada coincidió con la muerte del faraón.
A partir de este momento entramos en un periodo tremendamente importante en la historia de Egipto. Se produjo en él un cambio significativo principalmente en lo religioso y en lo artistico. Comprende los reinados de Imenhetep III (su final), Imenhetep IV/Ajenaton y Tutanjamon (su comienzo). Se trata del Periodo Amarniense (Tell el-Amarna). Los datos escritos de esta época son muy numerosos y por lo tanto es una etapa bien conocida.
Lo primero que hizo Imenhetep IV tras suceder a su padre fue casarse con la princesa Tadu-Jeba, que en un principio estaba destinada a casarse con su padre, con este acto asumía los compromisos diplomáticos de Imenhetep III con Mitani.
Imenhetep IV creía en el monoteísmo, o sea, en la adoración de un solo Dios. Era un Dios no visible físicamente, era la luz y el calor que desprendía el sol. Fue representado en forma de largos brazos procedentes de la corona solar que daban vida y protección a todo ser viviente. Le dio el nombre de Atón.
Inicialmente gobernó en Tebas durante 4 años. A lo largo de ese tiempo se formaron dos bandos: uno partidarios del clero de Amón y otros seguidores de Imenhetep IV y partidarios del Dios solar y único, Atón. Pero en el año cuarto estalló definitivamente la crisis religiosa. Rompió sus relaciones con el clero de Amón y él y sus seguidores partieron hacia el norte en busca de un lugar para construir una nueva ciudad. Lo encontraron a 224 Kilómetros y a la ciudad le pusieron por nombre Ajetaton (el Horizonte de Atón). Construyeron palacios, viviendas, jardines, templos a cielo abierto, escuelas. El faraón como seguidor del Dios único cambió su nombre pasándose a llamar Ajenatón (el que es útil a Atón). También lo hicieron altos cargos como su general de todos los ejércitos Horemheb que pasó a llamarse Paatonemheb. Desde Ajetaton estableció una lucha encarnizada contra el dios tebano Amón, mandó cerrar templos, borrar de todos los lugares visibles el nombre del dios.
Ajenatón estaba casado con Nefertiti, su esposa principal, la descendencia que tuvieron fueron todas mujeres y en un total de seis. Estos eran sus nombres: Meritaton, Meketaton, Anjesenpaaton, Neferneferuaton, Neferneferura y Setepenra. Ajenaton mantuvo relaciones con las tres primeras, llegando a tener un hijo con la primera y la segunda.
Cuando en el año 12 de reinado, Nefertiti se separó de Ajenaton, este se casó con su hija primogénita Meritaton, la cual ya estaba casada con Smenjara.
Dos años más tarde murió Nefertiti y es posible que entonces se asociase como corregente a Anjjeperura (Smenjara). Esta corregencia no duró mucho ya que ambos murieron transcurridos tres o cuatro años.
Durante esta etapa se produjo un paréntesis en la evolución artística en Egipto. Hasta entonces se había empleado la expresión artística aspectiva para representar la figura humana en muros, papiros, ostraca. Se caracterizaba primero por representar la figura humana mostrando la imagen más representativa de cada parte (cabeza de perfil, cuerpo de frente y piernas de lado) y segundo por dar al tamaño de la figura no un significado de perspectiva, si no de categoría social (a mayor tamaño, más alto cargo). En la etapa Amarniense se pasó a representar la figura de manera más real y un tanto exagerada: labios gruesos, ojos oblicuos, cráneo deforme, vientre voluminoso. En las representaciones de Ajenatón con su familia se les ve como personas deformes, aunque al final de esta etapa se suavizaron mucho los contornos, prueba de ello es la considerada como una de las obras cumbre del arte egipcio de todos los tiempos. Me refiero al busto de la reina Nefertiti de cuello de cisne y falto de la pupila izquierda y que fue encontrado en el taller del escultor real Tutmosis.
Le sucedió en el trono un joven de nueve años llamado Tutanjaton, se cree que era hermanastro de Ajenatón. Contrajo matrimonio con la tercera hija de este, Anjesenpaaton quien le trasmitió los derechos al trono. Durante los primeros años de su reinado vivió en Ajetaton, pero pronto se trasladó a Tebas. Promulgó un edicto restableciendo de nuevo el culto al dios Amón y a todos los demás dioses pero sin dar de lado al Dios Atón, a quien siguió adorando. Devolvió todos los bienes que tenían los templos y restableció el poder del clero tebano. Cambió su nombre y pasó a llamarse Tutanjamon.
Como era muy joven para reinar se hizo aconsejar por el ya anciano padre de Nefertiti, Ay y por el general de sus ejércitos Horemheb.
Tutanjamon falleció de muerte violenta a los 18 años. No tuvo hijos, por consiguiente con él se extinguieron el conjunto de monarcas que liberaron a Egipto de la invasión asiática y llevaron a esta nación a lo más alto de su poder y majestuosidad.
Tras el breve periodo de reinado de Ay, le sucedió en el trono el general Horemheb, seguidor por cierto del dios Horus. Aunque no tenía sangre real era el justo sucesor ya que durante los reinados de Ajenatón, Tutanjamon y Ay, había mantenido a raya los esporádicos intentos de invasión de los Hititas ya que para entonces el imperio mitanico había casi desaparecido.
Siguiendo el protocolo real se casó con la hija de Ay, Mutnedyemet. Durante sus veintiocho años de reinado procedió a una serie de reformas administrativas que pretendían remediar el caos provocado por las medidas de Ajenatón. A él se atribuyen la destucción del templo de Atón en Tebas y posiblemente también el principio de desmantelamiento de la ciudad de Ajetatón.
Con Horemheb termina definitivamente la historia de este periodo tan importante de la historia de Egipto.
Tebas en el Alto Egipto y Ajetaton en la etapa Amarniense
Personajes de esta dinastía:
Superintendente en Jefe de Amon
Famoso arquitecto de la reina Hatshepsut y posible amante suya. Fue tutor de su hija Neferure. Construyó el recinto funerario de Deir el-Medina. Enterrado en la tumba TT71 en la cercana colina de Sheikh Abd el-Qurna, aunque mandó construir otra muy cerca del templo funerario de Hatshepsut.
Alcalde de la Ciudad del Sur
Procedía de una familia de servidores del estado. Su hermano Imenempet llamado Pairy fue visir de Imenhetep II. Está enterrado en la tumba TT96 en la colina Sheikh Abd el-Qurna. La decoración, sobre todo de su techo está constituido por un gran racimo de uvas, es por ello que sea mas conocida como la tumba de las viñas.
Gobernador de la Ciudad y visir
Vivió en la época de Dyehutimes III y Imenhetep II y ocupó el puesto de visir, despues del faraón el más importante. Fue enterrado en la colina Sheikh Abd el-Qurna en la tumba TT100. Una peculiaridad de esta tumba es que carece de pozo funerario, por lo cual se baraja la hipotesis de que Rejmire fue enterrado en realidad en el Valle de los Reyes.
Escriba de los Campos del Señor de las dos tierras
Gobernador de la Ciudad y visir
Fue visir en tiempos de Imenhetep III y Imenhetep IV/Ajenaton. Seguramente vivió en Tebas y posteriormente en Ajetaton siguiendo a su faraón Ajenaton. Fue enterrado en la colina Sheikh Abd el-Qurna en la tumba TT55.
Primer Profeta de Menjeperra
Vivió en tiempos de Dyehutimes III. Está enterrado en la tumba TT31.
Supervisor de los Trabajos
Llamado Pahekmen. Está enterrado en la tumba TT343.
Visir y Arquitecto
Nació en Athribis. Sus trabajos fueron realizados bajo el reinado de Imenhetep III. Fue deificado en el Período Ptolomaico. Poseedor de su propio templo funerario y su tumba se situó en Qurnet Murai.
Primer Profeta del Ka de Dyehutimes II
Está enterrado en la tumba TT51.
Estos son los cartuchos reales correspondientes a esta dinastía:
Dinastía XIX
El primer faraón de esta dinastía fue el general Parameses, que al aceptar el trono ofrecido por Horemheb, al no tener este descendencia masculina, adoptó el nombre de Ramessu I. Era una persona de avanzada edad por lo que asoció inmediatamente al trono a su hijo Sety I. Su reinado duró apenas dos años dejando a su muerte a Sety I como único rey.
Aunque la capital seguía siendo Tebas, trasladaron la capital práctica a una ciudad de reciente construcción llamada Pi-Rameses, en el Delta, muy cerca de Avaris. Como militares que eran establecieron aquí la capital para poder atacar, si era preciso, mas rapidamente al imperio Mitani que seguían sus luchas contra el pueblo egipcio.
Tanto Horemheb, como Ramessu I y Sety I eran partidarios del dios Ra , así como de Osiris y de los eminentemente guerreros Horus y Seth.
Sety I conquistó la ciudad de Qadesh, pero cuando este se retiró los egipcios la perdieron nuevamente.
Empezó a explotar nuevamente las minas de oro situadas en Nubia, para restablecer un poco el auge económico perdido en la etapa Amarniense.
Sety I fue un gran constructor, destacando los trabajos realizados en el templo de Amón en Karnak y el templo de Osiris en Abido.
Al morir Sety I le sucedió en el trono Rameses II. Este es sin duda el faraón más conocido de la historia de Egipto. Fue como su padre un gran constructor, lo demuestran todos los colosales monumentos que mandó construir, desde los templos de Abu Simbel en Nubia hasta el Ramesseum en Tebas pasando por infinidad de templos más pequeños que le harían mencionar su nombre por todo el país.
Fue también un valiente combatiente. En el año cinco de reinado luchó contra el rey de Mitani Muwatalli. En la famosa y documentada batalla de Qadesh, cayó en una trampa de los Hititas pero gracias a su valor personal y al de su ejercito logró equilibrar las fuerzas produciéndose una retirada de las tropas por ambas partes sin haber vencedores ni vencidos. Esto fue el primer paso de la firma de un tratado de no agresión mutua que se firmó en el año 21 de reinado entre Rameses II y el entonces rey de Mitani Hatusil III.
Hay que señalar que durante su reinado se llevó a cavo la persecución religiosa contra el Dios Atón. Su nombre fue borrado de todos los templos y todos los nombres reales de monarcas colocados en las estatuas y monumentos relacionados con la etapa Amarniense y por lo tanto considerados herejes también fueron borrados y sustituidos por el de Rameses II.
Estuvo casado con Nefertari que fue la esposa principal, aunque se casó con muchas más algunas veces por motivos políticos. Se cuenta que tuvo cerca de 200 hijos, los principales están enterrados en una tumba colectiva (KV 5) en el Valle de los Reyes.
Aunque mantenía la paz con los Mitanis, Rameses II tuvo que hacer frente a las frecuentes incursiones de los Asirios y sobre todo a unos pueblos procedentes de la zona del Mar Negro que los egipcios llamaron los Pueblos del Mar.
Al morir le sucedió su decimotercer hijo Merenptah, ya que los anteriores habían fallecido antes. Durante su reinado se ocupó esencialmente de contrarrestar los ataques de los Pueblos de Mar (Shardana, Shakalsha, Tursha, Danuna, Akaiuasha, Luka, Peleset y Stakar) que poco a poco fue dominando. Para conmemorar estas victorias Merenpath mandó erigir una estela enumerando todos los pueblos vencidos y aniquilados. Es la famosa estela de Israel donde se menciona por primera vez en la historia de Egipto a este pueblo.
A partir de aquí Egipto entró en una etapa de decadencia y usurpación del poder. Los siguientes faraones Imenmeses y Sety II no aportaron gran cosa. El sucesor de Sety II, su hijo Saptah fue un joven enfermizo así que su madre Tauser tuvo que hacerse cargo desde un principio del gobierno de la nación. Con ella termina la etapa histórica de la XIX dinastía.
Mientras tanto, los Pueblos del Mar que se habían retirado a Asia Menor, arrasaron definitivamente al pueblo Hitita.
Tebas en el Alto Egipto y Pi-Rameses en el Delta por razones estratégicas.
Servidor en el Lugar de la Verdad
Vivió en tiempos de Sety I y Rameses II. Está enterrado en la tumba TT1.
Estos son los cartuchos reales correspondientes a esta dinastía:
Dinastía XX
La profunda crisis en la que se había asumido Egipto durante el reinado de Tauset y posteriormente el de un enigmático personaje llamado Yarsu fue compensada en parte por la subida al trono de Setnejet. Su reinado fue breve teniendo que subir al trono poco después su hijo Rameses III. Este fue el último gran faraón del Imperio Nuevo. Durante su reinado tuvo que hacer frente a numerosos ataques de los Pueblos del Mar siendo siempre vencidos por tierra y por mar por Rameses III. Sus importantes victorias salvaron a Egipto de los invasores, pero su final fue trágico ya que murió a consecuencia de un complot palaciego.
Los reinados de los siguientes Ramésidas fueron breves y sin importancia. Egipto entró en una etapa de decadencia, corrupción, inflación agravada además por las malas cosechas obtenidas durante los reinados de los últimos Ramésidas. Durante el reinado de Rameses IX comenzó el saqueo sistemático de las tumbas reales en Tebas y posteriormente con Rameses XI se persiguió a todo aquel que fuese seguidor del dios Seth cuyas finales consecuencias fueron el abandono y desmantelamiento de las ciudades de Avaris y Pi-Ramases por considerarlas partidarias del dios. La capital estratégica se estableció en Tanis por estar consagrada al dios Amón.
En el año 19 de reinado de Rameses XI el gran Sacerdote de Amón, Imenhetep, fue cesado por decisión real por faltas muy graves y sustituido por Heriher. Este no pertenecía al clero ya que era militar y persona de confianza del faraón. Pero Heriher era ambicioso y poco a poco se fue apoderando de cargos de importancia llegando incluso a establecer una doble fecha: la del reinado de Rameses XI y la suya. A esta época se la conoce con el nombre de Repetición de Nacimientos.
El poder de Rameses XI se fue apagando poco a poco concluyendo con él la saga de los Ramésidas. Heriher le usurpó el trono llegándose a proclamar faraón e incluso hizo encerrar su nombre dentro de los cartuchos reales.
Su hijo Pianj le sucedió pero su reinado no tuvo importancia. Esta etapa dio fin a esta importante parte de la historia de Egipto.
Tebas en el Alto Egipto y durante los últimos años de la dinastía XX, Tanis en el Delta.
Estos son los cartuchos reales correspondientes a esta dinastía:
* Wallis Budge menciona en uno de sus libros el cartucho de Rameses XII pero este faraón no es seguro de que existiera.
Era del Renacimiento